Busque la Presencia de Dios, nuestro Padre en el Cielo, y todos los días a solas en secreto con Él.
Hermanos, caminar con Dios no es una carga, sino una bendición.
Es un lugar diaria de renovación, un lugar donde su espíritu se restaura
Su Espíritu, un lugar donde se eliminan el estrés y los sentimientos de
desánimo y reemplazados por abundante paz y alegría.
Para ir un día sin ser renovada por la presencia refrescante de Espíritu
del Padre es semejante a ir un día sin dormir o descansar.
Por siguiente día después de ir sin una noche de descanso que van a ser físicamente agotado y cansado.
En la Presencia de Dios es donde hallaréis descanso para vuestras almas.
Al saltarse un día con Dios, su alma se agotará y cansado.
Este estado de ser se llama el desaliento y la derrota.